Daniel López López
Pero, ¿qué sucede cuando estos directores de orquesta no están sincronizados con el resto de la orquesta? ¿Qué sucede cuando la iluminación y el metamerismo no se controlan adecuadamente? La respuesta es simple: el caos. Los colores pueden parecer inconsistentes, las imágenes pueden perder su impacto y la visión del artista puede perderse en la traducción.
En este artículo, voy a desvelar los secretos de estos dos 'actores invisibles', explorando cómo pueden hacer o deshacer una obra de arte gráfica, y revelando las estrategias que los profesionales de la industria utilizan para mantenerlos bajo control. Así que, siéntate, relájate y prepárate para descubrir cómo dominar la iluminación y el metamerismo puede cambiar tu mundo de colores
Iluminación en las Artes Gráficas: Más que una Simple Luz
La iluminación en las artes gráficas es un aspecto fundamental que a menudo se subestima. Sin embargo, su papel es esencial en la representación y percepción del color. La luz es la varita mágica que revela el vibrante espectro de colores en nuestras creaciones. Pero, al igual que una varita mágica, la luz puede ser caprichosa. Cambia con la hora del día, con el clima, con la ubicación y con la fuente de luz. Y con ella, cambia nuestra percepción del color.
En un entorno de trabajo ideal, como una oficina de diseño gráfico o una imprenta, es crucial tener una iluminación controlada y consistente. Esto permite una representación precisa del color y ayuda a evitar malinterpretaciones causadas por la interacción de la luz con los colores circundantes. Por lo tanto, la iluminación es una pieza clave en el rompecabezas de las artes gráficas. Su importancia radica en su capacidad para influir en cómo se perciben y se representan los colores, lo que a su vez puede afectar la calidad y la precisión de las obras de arte gráfico.
Metamerismo: El Camaleón Cromático
El metamerismo, es un fenómeno óptico que causa que los colores parezcan diferentes bajo distintas fuentes de luz, tiene un papel crucial en las artes gráficas. En el contexto de la impresión, puede llevar a variaciones en la percepción del color dependiendo de la iluminación bajo la cual se observe el producto final. Por ejemplo, un color puede parecer distinto bajo la luz del día en comparación con la luz artificial.
Para entender qué causa un match metamérico, es importante apreciar que ocurre no como resultado de una variación en el estado del espectador (en este caso el ojo humano), sino un cambio en las condiciones de visualización. Diferentes iluminantes (fuentes de luz) tienen una distribución de energía espectral específica, o longitud de onda, y cualquier objeto (en este caso una muestra de color) interactúa con el iluminante de manera única, absorbiendo algunas y reflejando la energía espectral restante y determinando así el color del objeto interpretado por el cerebro y el ojo humanos.
La ISO 3664:2009: Un Faro en la Oscuridad
La norma ISO 3664:2009 es un conjunto de especificaciones que define los objetivos y las tolerancias para las condiciones de visualización D50, esenciales para la evaluación de imágenes impresas, fotográficas, transparencias y presentaciones en monitores de color.
Esta normativa ISO se compone de cinco puntos clave que son:
- Calidad del color
Las coordenadas de cromaticidad de una fuente de luz deben estar dentro de un radio de 0.005 de las coordenadas de cromaticidad D50 (u'10 = 0.2102, v'10 =0.4889). La temperatura del color debe ser de 5000K. Aquí, 5000K se refiere a la temperatura de color en grados Kelvin, que se utiliza para describir el aspecto de la luz emitida por una fuente de luz. Sin embargo, no todas las lámparas de 5000K son iguales. La distribución espectral de la potencia es el factor más importante para determinar la representación de los colores. Debe ser lo más cercana posible a la iluminante D50 del CIE. El Índice de Rendimiento de Color (CRI) debe ser de 90 o más, y el Índice de Metamerismo debe ser MIVIS<1, MIUV <1.5.
- Intensidad de la luz
Las pruebas y las impresiones deben ser de 2000 lux con una tolerancia preferida de +/- 250 lux y una tolerancia requerida de +/- 500 lux. Aquí, lux es una unidad de medida de la intensidad luminosa, que se utiliza para describir cuánta luz se percibe en un área determinada. Las transparencias deben ser de 1270 cd/m2 con una tolerancia preferida de +/- 160 cd/m2 y una tolerancia requerida de +/- 320 cd/m2.
- Uniformidad
Las impresiones y las pruebas deben ser de al menos 1200 lux (60% de 2000 lux) en todos los puntos de la superficie de visualización. Las transparencias deben estar dentro del 75% del nominal (953 cd/m2).
- Entorno
Para las impresiones y las pruebas, se debe utilizar un entorno neutro y mate con una reflexión luminosa del 10% al 60%. El 60% de reflectancia es comparable al gris N8/ de Munsell. Para las transparencias, el nivel de luminancia debe ser del 5% al 10% a 50mm de los lados.
- Geometría
La fuente de luz, la imagen y los ojos del observador deben estar posicionados para minimizar el deslumbramiento. La norma no especifica la geometría de la iluminación, pero establece que se debe minimizar el deslumbramiento.
- Medición del Color y Datos Espectrales: Toma el Control
Un sistema muy efectivo es medir el color utilizando la misma iluminación que se utilizará para la visualización final, esto garantizará la precisión del color y evitará el metamerismo. Para ello podemos utilizar los datos espectrales y comprobar las diferencias del color bajo diferentes tipos de iluminación, al analizarlo podremos entender cómo un color cambiará bajo distintas condiciones de iluminación y cuantificar las diferencias de color entre objetos o entre un objeto y un estándar de color.
Conclusión
Quizás ahora comprendas por qué ese color cambia cuando cambia la luz, o por qué tu cliente no está satisfecho con el color que ve en diferentes condiciones de iluminación. No es magia, es ciencia. Es la ciencia de la iluminación y el metamerismo, dos factores cruciales que, cuando se manejan correctamente, pueden hacer que tus creaciones gráficas brillen con la luz correcta.
Por lo tanto, la próxima vez que te encuentres con un cliente insatisfecho o un color que simplemente no se ve bien, recuerda: tienes el control. Con el conocimiento y las herramientas adecuadas, puedes asegurarte de que tus creaciones gráficas siempre se vean tal y como las imaginaste, independientemente de la luz bajo la que se vean. Y eso, en última instancia, es la verdadera magia de las artes gráficas. Así que, recuerda, el conocimiento es poder... y en este caso, ¡el poder de controlar la luz!