Redacción Alabrent
Hasta hace poco, esta brecha se cubría parcialmente con la impresión directa sobre tejido. Sin embargo, este método requiere importantes inversiones iniciales en equipos y depende en gran medida del procesamiento previo y posterior de los tejidos, que consume mucho tiempo y recursos, para garantizar la solidez y precisión del color y la compatibilidad con diferentes sustratos. En consecuencia, surgió la necesidad de una solución más sostenible y rentable que pudiera satisfacer una gama más amplia de textiles.
Cerrando la brecha: el nacimiento de TRAPIS
En respuesta a esta demanda, Mimaki dedicó seis años a desarrollar una tecnología revolucionaria, TRAPIS, una sencilla solución de impresión por transferencia textil en dos pasos que consta únicamente de una impresora de inyección de tinta y una calandria de alta presión. La impresora de inyección de tinta imprime el diseño elegido sobre el innovador papel de transferencia de tinta pigmentada Texcol® de la empresa, que luego se transfiere a la aplicación a través de la calandria.
La eliminación total de las etapas de tratamiento significa que la impresión sobre materiales que no son de poliéster ha pasado de ser una tarea costosa y que requiere mucho tiempo a una tarea sencilla, rentable y más sostenible.
Ideal para textiles para el hogar y señalización textil que a menudo requieren colores vibrantes pero materiales variados, esta tecnología ofrece a los impresores la capacidad de imprimir sobre una amplia variedad de materiales, incluidas fibras naturales como el algodón y la seda, sin perder elasticidad ni solidez del color. Todo esto se puede hacer con un solo tipo de tinta, lo que hace que el proceso sea flexible y adaptable a las demandas de los clientes.
Un futuro brillante: los beneficios ambientales de TRAPIS
En la impresión digital con tintas, a menudo es necesario el pretratamiento y el lavado de los tejidos, lo que produce una cantidad significativa de aguas residuales en el proceso. TRAPIS elimina estas etapas por completo y prácticamente no utiliza agua, lo que permite ahorrar alrededor de 14,5 litros por metro cuadrado de agua, una reducción de casi el 90% en comparación con la impresión digital con tintas. Además, esto elimina la necesidad de instalaciones de tratamiento de aguas residuales, que pueden resultar caras y restrictivas en función del lugar donde se instale la solución.
Si tenemos en cuenta que los procesos de teñido tradicionales generan la asombrosa cantidad de aproximadamente 2 mil millones de toneladas de aguas residuales todos los días en los procesos de pre y postintado en todo el mundo, las reducciones que TRAPIS puede ofrecer contribuirán significativamente a reducir el impacto ambiental de un proveedor de impresión. Además, con su flujo de trabajo de impresión simplificado, se elimina el complejo transporte internacional de productos textiles, que genera una gran cantidad de emisiones de CO2.
La tinta pigmentada textil a medida de Mimaki que acompaña a la solución ha obtenido la certificación ZDHC MRSL Lv.3* y está aprobada por bluesign®, lo que verifica no solo su respeto por el medio ambiente, sino que también garantiza que es segura tanto para los trabajadores como para los consumidores.
Ofreciendo una solución sencilla
La simplicidad y asequibilidad de TRAPIS también lo hacen ideal para la producción textil localizada y de tiradas cortas. Como el proceso solo implica impresión y transferencia, no requiere habilidades especializadas para operar en comparación con el sistema más complejo de siete u ocho pasos que necesitan la mayoría de las impresiones digitales y analógicas convencionales. La falta de una cinta transportadora de tela en el sistema minimiza aún más la necesidad de un mantenimiento que requiere mucho tiempo.
Al simplificar el proceso de impresión textil digital y hacerlo accesible a una gama más amplia de textiles, la solución TRAPIS es una innovación que ayuda a marcar el ritmo de prácticas más sostenibles en la industria textil, al tiempo que ofrece una gama inigualable de posibilidades creativas.