Redacción Alabrent
En el pasado, la industria de la impresión basaba sus estrategias operativas en la disponibilidad de capacidad de producción. Pero eso ya no funciona para los tiempos actuales de ritmo acelerado, cambios rápidos y alta exigencia. Ahora, una estrategia efectiva se forma en torno a las necesidades de los clientes. Quieren mayor flexibilidad, tiradas más pequeñas y más servicios.
Con la decisión tomada de volvernos 100% digitales, comenzamos nuestra investigación y análisis.
Reveló incertidumbres, criterios complejos y dificultad para trazar una hoja de ruta objetiva. Fue un comienzo desafiante donde las certezas eran escasas y esquivas. Ante este telón de fondo hubiera sido fácil repensar y posponer la decisión, aunque sabíamos que tomar el camino 100% digital era inevitable. Sin embargo, la visión y la determinación nos impulsaron hacia adelante.
Para aquellos que estén interesados en aprender de nuestra experiencia, hay tres áreas principales que deben ser consideradas y compartiré algunas reflexiones sobre cada una de ellas. Spoiler: tener socios confiables y comprometidos es clave.
1 Tecnología cambiante
Cualquier comodidad que sintiéramos con el equipo de impresión que entendíamos desapareció al hacer comparaciones entre dispositivos que nunca fueron inequívocos o totalmente cuantificables. Esa realidad fue finalmente una bendición para Tórculo. Cuando tomamos la decisión de invertir, pronto comprendimos que tan importante como la rotativa y su rendimiento era la calidad general del proveedor. Ninguna máquina realiza la transformación por sí sola.
Ricoh se posicionó como un gran proveedor de tecnología, ofreciendo equipos disruptivos capaces de satisfacer demandas que ninguna otra máquina de inyección de tinta en el mercado hizo. Las características diferenciadoras de la Ricoh Pro™ VC70000 incluyeron la calidad y la profundidad de sus colores impresos en papeles estucados sin tratar e ilustraciones de costo competitivo que presentaban un poderoso argumento con respecto a la captura de volumen que pasa de offset a digital.
Pero, ¿y los miedos? El mayor, creo, fue el riesgo de obsolescencia en las inversiones que tienen largos períodos de recuperación. Ricoh nos mostró cómo sus dispositivos, de todas las gamas de productos, pueden actualizarse constantemente con nuevas mejoras. Más allá de la tecnología, nos gustó la capacidad de un gran proveedor para comprometerse con el negocio de sus clientes y proteger sus inversiones.
2 Transformando personas
Tórculo es un ecosistema en sí mismo, como lo son todas las imprentas que yo sepa. Ecosistemas formados por tecnologías, procesos y personas. Los dos primeros son claramente digitalizables.
¿Qué pasa con la gente? Esto puede ser todo un desafío. La transformación digital afecta al colectivo, pero ignorar el hecho de que el colectivo está formado por individuos puede tener consecuencias de largo alcance. En la producción, serán las personas las que tendrán que pasar de la conocida y entendida tecnología offset de alimentación de hojas a la nueva y desconocida prensa de inyección de tinta de alimentación por bobina. Creemos que un buen operador es siempre un buen operador, y nuestro equipo lo ha demostrado. Como resultado, solo necesitábamos una buena capacitación y un plan para involucrarlos y disipar sus temores.
Sin embargo, los temores no se limitan a la planta de producción. Los equipos de ventas y marketing han pasado años, incluso décadas, ganándose la confianza de los clientes con la tecnología offset en el centro de la oferta. De repente, la adición de Ricoh Pro VC70000 requirió un replanteamiento de estrategias, objetivos y propuestas de valor.
Nuevamente, aquí es donde un socio sólido es clave. Completamente integrado en nuestra estructura, el programa de consultoría de desarrollo empresarial EDGE de Ricoh nos ayudó a navegar por las perspectivas cambiantes de lo individual y lo colectivo. Esto ayudó a transformar la sospecha en aceptación del cambio, esencial para poder traer al mercado todo el valor que ahora podemos agregar.
3 Gestión del aumento de la producción
En Tórculo siempre hemos empleado buenos niveles de automatización, pero nuestra transformación nos obligó a subir un escalón más. O varios. La tecnología de Ricoh aumentó nuestra capacidad de producción y nuestra habilidad para llevarla al mercado.
Los procesos de instalación y prueba que se realizaron en paralelo en nuestro taller y en nuestra área de preimpresión plantearon algunos problemas, dilemas y necesidades potencialmente significativos. Y, nuevamente, el valor de tener los socios adecuados resultó ser vital. Con aplicaciones propias, de terceros o personalizadas, los especialistas de Ricoh demostraron que los valores insustituibles que los diferencian están en su conocimiento, talento y compromiso. Hicieron suya cada inquietud y combinaron realismo con eficiencia a partes iguales.
Hoy puedo decir con orgullo que el flujo de trabajo de Tórculo es uno de los mejores de la industria en robustez, flexibilidad y automatización.
Creemos que el valor futuro de la industria gráfica radica en cómo respondemos a todos los cambios y transformaciones que también están experimentando nuestros clientes. Queremos asegurarnos de que somos el socio que siguen eligiendo, y trabajar con Ricoh nos ha ayudado a desarrollar nuestra oferta y servicio para permitirnos hacer eso.