Redacción Alabrent
El estudio, realizado apenas un mes antes de la COP26, encuestó a impresores de ropa que prestaban servicio a una sección transversal de grandes empresas y PYMES en Europa. Reveló que más de dos tercios (64 %) habían observado un aumento de clientes que pedían prendas sostenibles, y la mayoría (51 %) informó de un fuerte incremento del 30% o más.
La encuesta también revela que este aumento del interés está impulsando las oportunidades comerciales del sector. Casi la mitad (48%) de los encuestados considera que la sostenibilidad es una «gran oportunidad comercial» para su empresa. Un tercio cree que los clientes están dispuestos a pagar más dinero por las prendas sostenibles, y una cuarta parte afirma que generan mayores márgenes.
Rosie Lees, fundadora y directora general de The Embroidery Barn en el Reino Unido, apunta: «Cuando relancé el negocio en 2018, decidí centrarme en la sostenibilidad de nuestras prendas y prácticas de impresión y esperaba que diera sus frutos en un plazo de cinco a siete años. En realidad, no he tenido que esperar tanto tiempo. En los últimos 18 meses ha sido nuestro principal motor de crecimiento y el 95 % de nuestros clientes mencionan la sostenibilidad cuando se les pregunta».
Hay pruebas sólidas de que los clientes creen que las prácticas de impresión desempeñan un papel fundamental en la sostenibilidad. Dos tercios (64%) de los encuestados informaron de un aumento de las consultas sobre el carácter ecológico de estas prácticas.
Los impresores de ropa están respondiendo invirtiendo en impresoras, tintas y equipos respetuosos con el medioambiente. A pesar de la recesión económica provocada por la COVID-19, un enorme 47 % de los impresores de prendas de vestir habían tomado medidas para aumentar la sostenibilidad de sus prácticas de impresión.
Encarna Luque, jefa de textiles de la empresa europea de impresión Roland DG, comenta: «ESG se mantiene con firmeza en el punto de mira y, como resultado, hemos observado un importante cambio en las prioridades de los clientes, que se alejan del precio y se acercan a la sostenibilidad. Los impresores de ropa son algunos de los empresarios más emprendedores de nuestro sector, y no es de extrañar que inviertan en esta oportunidad emergente a pesar del difícil entorno macroeconómico».