Redacción Alabrent
En un entorno digital donde diferenciarse es un factor clave de éxito, la tecnología del barnizado digital consigue transformar las impresiones en experiencias sensoriales únicas. Con la posibilidad de añadir acabados de recubrimiento, resaltar detalles específicos y crear efectos 3D, esta herramienta es capaz de proporcionar a cada proyecto una pieza visualmente atractiva que realza la imagen de la marca.
Por ello, Konica Minolta, ofrece la implantación de la tecnología digital de barnizado de MGI, que transforma los servicios de impresión, consiguiendo hacer más accesible y eficiente la creación de efectos visuales y táctiles exclusivos, incluso en producciones cortas y con plazos ajustados, permitiendo así, aplicar acabados de recubrimiento, resaltar zonas específicas y agregar efectos 3D a sus impresiones, creando un producto único y visualmente impactante que eleva el prestigio de la marca en el mercado de la impresión.
En su línea de producto, Konica Minolta dispone de la tecnología de MGI JETVARNISH 3D capacitada para atraer nuevos clientes potenciales y aprovechar las nuevas oportunidades lucrativas del mercado, ofreciendo a sus clientes funciones de recubrimiento ultraprecisas y permitiéndole utilizar originales offset o digitales en tiradas cortas o largas, e incluso variar el grosor del recubrimiento para obtener impresiones atractivas con una profundidad tangible a fin de aumentar el impacto de las comunicaciones.
Esta atractiva tecnología es interesante para cualquier proveedor de servicios de impresión que utilice sistemas de impresión offset o tóner, y permite al usuario añadir un toque creativo a una amplia gama de aplicaciones. El procedimiento es llevado a cabo por la MGI JETVARNISH 3DS, un dispositivo de barnizado UV por zonas que cuenta con impresión de una sola pasada y ofrece una alta productividad y velocidad, además cuenta con el sistema AIS SmartScanner para automatizar el registro de hoja a hoja.
Finalmente, en un mercado cada vez más competitivo, un envase distintivo se convierte en un factor clave para captar la atención del cliente y destacar frente a la competencia. Un diseño atractivo marca la diferencia en la decisión de compra del consumidor.