Redacción Alabrent
A lo largo de los años, L2 ha demostrado su compromiso con esta visión de futuro, previendo las posibles tendencias del sector y anticipando, con una respuesta eficiente, los diferentes retos. Esta visión fue la que les impulsó en 2010 a migrar de las tecnologías solventes a la impresión digital UV para mejorar su sostenibilidad, a digitalizar en 2014 todos sus procesos bajo una política de "papel 0" o, en 2016, a transformarse en una empresa orientada a los servicios integrales relacionados con la comunicación gráfica, lo que impulsó un cambio de imagen bajo el lema 'more than printing'.
Ahora, en 2024, L2 comienza una nueva era con la renovación de sus impresionantes instalaciones, la actualización de su parque de maquinaria y el avance hacia un nivel de digitalización end-to-end, con el objetivo de incrementar su capacidad productiva, agilizar los tiempos de producción, minimizar el porcentaje de desperdicio y optimizar los costes para garantizar un servicio infalible. Por supuesto, como parte de este proyecto, también implementará un conjunto de medidas en línea con su estrategia de mejora continua en términos de sostenibilidad, con el objetivo de reducir los costes y consumos energéticos, lo que podría suponer un ahorro del 78%, según sus previsiones, al cierre de 2024.
En este contexto, se ha producido también la adquisición de dos nuevas unidades Durst de impresión digital inkjet: una P5 350 HS integrada con el stacker Automat, que fue instalada el pasado mes de julio en su planta de producción, y una unidad P5 500, que formará parte del parque de maquinaria de la empresa próximamente. Sin embargo, la historia de partnership entre la empresa lisboeta L2 y la tirolesa Durst se remonta a los inicios de la primera, cuando decidió incorporar un equipo Lambda, una de las soluciones más icónicas de Durst. Cuatro años más tarde, en 2010, instaló una unidad Rho 500 que sigue operativa y en perfecto estado. Por el histórico entre las dos empresas, que ya suman 18 años de colaboración, Vasco Sousa, director y propietario de L2, comenta acerca de su renovada apuesta por las soluciones de Durst: "Para nosotros, Durst es fiabilidad, calidad y productividad. La capacidad de obtener el mejor output se debe a la velocidad de impresión y al mejor resultado en efectividad total de sus equipos (ETE). Esto, sumado a su longevidad, hace de estas soluciones una apuesta muy interesante en términos de retorno de la inversión y, en consecuencia, se genera una relación de confianza, que también es promovida por el enfoque de servicio y el acompañamiento post-venta de Durst".
Sobre la finalización de este proyecto de transformación, L2 confirma que está previsto que tenga lugar a finales de 2025. "Comenzamos haciendo una apuesta contundente, atípica, por nuestro compromiso no solo con el éxito a corto plazo del proyecto, sino pensando en el futuro. Ahora estamos dando un nuevo gran paso que supondrá una 'nueva era' para L2 y que se traducirá en más capacidad productiva, menor huella de carbono y la garantía de un servicio basado en la excelencia", señala Vasco Sousa al respecto.
Con esta importante apuesta, la empresa, que se ha consolidado como un referente para el sector de los eventos y que también opera en el sector del retail y el punto de venta, vuelve a mostrar su compromiso con la excelencia y la innovación, anticipándose una vez más a los retos que puedan surgir. Por todo ello, tras casi veinte años de historia, L2 es un ejemplo de continua innovación, mostrando cómo una visión a largo plazo y la apuesta firme por el mejor equipo de profesionales, la digitalización de los flujos de producción y la adopción de tecnologías de vanguardia son clave para un proyecto de futuro exitoso y sostenible. Con un sólido compromiso con la calidad y el servicio, L2 está lista para afrontar, una vez más y desde un enfoque de excelencia, los desafíos del futuro.
