Redacción Alabrent
En España, se ha observado un traslado notable de empresas hacia tamaños más grandes en términos de facturación, lo que indica una consolidación en el mercado. La facturación en 2022 experimentó un crecimiento cercano al 12% en comparación con el año anterior. Es importante destacar que este aumento fue impulsado en parte por el incremento en los precios del producto provocado por el proceso inflacionista alcista en las materias primas, lo que demuestra la capacidad de adaptación y la salud del sector.
El resultado medio ha arrojado cifras muy positivas, aproximadamente un 7%, lo que refleja una eficiencia y rentabilidad generalizada en las empresas del sector. Además, el EBITDA ha vuelto a marcar valores del 13%, lo que indica una sólida gestión operativa y financiera en las empresas de etiquetas en España.
Por otro lado, en Portugal, el sector de etiquetas también ha mostrado un desempeño notablemente positivo. El EBITDA ha superado al mercado español en casi dos puntos porcentuales, lo que destaca la solidez y eficiencia del sector en Portugal. Además, el resultado medio en este país ha sido igualmente positivo, superando el 6%.
En resumen, el año 2022 ha sido testigo de un crecimiento y una evolución positiva en el sector de etiquetas tanto en España como en Portugal. Estos resultados reflejan la resiliencia y la capacidad de adaptación de las empresas en un entorno cambiante, así como su compromiso con la excelencia operativa y la satisfacción del cliente. Se espera que esta tendencia positiva continúe en los próximos años, respaldada por la innovación, la inversión y la demanda del mercado.
Por otro lado, durante 2023 el sector ha experimentado una caída del 3% a nivel global. Sin embargo, en medio de un panorama global desafiante, con escasez de materias primas, acumulación de existencias, interrupciones en la cadena de suministro, aumento de costes y declive económico, Iberia emerge como un mercado en crecimiento, demostrando una resiliencia notable y mostrando signos alentadores de recuperación.
Según los últimos informes del sector elaborados por AIFEC, España ha logrado mantener sus resultados en niveles prepandemia, una hazaña que destaca su capacidad para adaptarse y prosperar en un entorno empresarial cambiante. Sin embargo, lo que es aún más notable es la clara polarización que se observa dentro del mercado español, con un crecimiento impulsado principalmente por empresas más grandes y más pequeñas.
"España ha demostrado una notable capacidad para recuperarse en medio de desafíos globales significativos", comentó José Carrasquer, Director General de ETYGRAF Grupo Asteria y Presidente de AIFEC. "Lo más interesante es la dinámica que estamos viendo dentro del mercado, con un crecimiento concentrado en empresas que tienen la agilidad para adaptarse rápidamente a las demandas del mercado, ya sea a través de innovación, personalización o eficiencia operativa".
En contraste con la tendencia global, Portugal ha experimentado un crecimiento mucho mayor en el sector de fabricantes de etiquetas durante el mismo período. Este crecimiento se ha atribuido en gran medida a una alta mejora de la productividad dentro de la industria, lo que ha llevado a resultados financieros más sólidos y un aumento general en la competitividad.
"Portugal ha logrado impulsar su sector de fabricantes de etiquetas mediante un enfoque decidido en mejorar la productividad y la eficiencia", afirmó Carlos Coll, Director de la División de Etiquetas del Grupo Printeos y miembro de la junta directiva de AIFEC. "Este enfoque ha dado lugar a un crecimiento significativo y demuestra el impacto positivo que puede tener una estrategia centrada en la mejora continua".
A medida que el sector de fabricantes de etiquetas continúa adaptándose a un entorno empresarial en constante evolución, es evidente que tanto España como Portugal están liderando el camino con enfoques únicos, pero igualmente exitosos. Estas tendencias destacan la importancia de la innovación, la adaptabilidad y la eficiencia en un mercado global cada vez más competitivo.