Redacción Alabrent
En concreto, Ricoh se ha comprometido con la organización Make UK y el gobierno del Reino Unido a ayudar, mediante el uso de su tecnología de fabricación aditiva, para producir de forma rápida y rentable componentes vitales para los respiradores artificiales, una de los elementos básicos que necesitan los hospitales en la actual crisis sanitaria debida a la expansión de la enfermedad.
Este anuncio se produce después del llamamiento del Secretario de Salud británico, Matt Hancock, para que los fabricantes del Reino Unido trabajen juntos de manera urgente para aumentar el número de respiradores disponibles en el sistema sanitario público. Según Hancock, el Reino Unido actualmente tiene 5.000 respiradores, pero necesita multiplicar ese número. Por ello ha instado a los fabricantes del Reino Unido a involucrarse de cualquier forma posible.
Mark Dickin, responsable de Ingeniería de Fabricación Aditiva y Modelación en Ricoh 3D, ha afirmado: “A medida que se intensifica la crisis del coronavirus, la fabricación aditiva tiene un papel vital que desempeñar para producir urgentemente nuevos respiradores artificiales, de forma rápida y económica. Nuestro equipo de expertos está disponible para diseñar y producir las piezas necesarias en cualquier momento y así contribuir a salvar vidas". El coste habitual de estas válvulas ronda los 10.000 €, pero con impresión 3D se pueden producir por cerca de 1€ cada una.
Ricoh 3D ya ha participado en proyectos médicos que han mejorado las condiciones de vida de miles de personas. Esto incluye el desarrollo de un mecanismo de palanca-bisagra para prótesis tobillo-pie y la participación en una nueva tecnología revolucionaria que visualiza las extremidades escaneadas y las replica con precisión utilizando la impresión 3D antes de la operación. Los instrumentos quirúrgicos también se pueden producir mediante fabricación aditiva y se usan típicamente para operaciones complejas.
