Redacción Alabrent
«El coste de las materias primas ha sufrido una escalada extraordinaria e imprevista debido a unos acontecimientos mundiales igual de inesperados.»Esta cita de Acigma, la asociación de fabricantes italianos de maquinaria para la industria gráfica, del papel y de la conversión, resume la situación a la que se enfrenta hoy en día el sector de los embalajes. La pandemia de COVID-19, el conflicto en Ucrania, la inflación de los precios y otros factores han generado diversos cuellos de botella en toda la cadena de suministro global durante los dos últimos años.
La disponibilidad y el precio de las materias primas es una cuestión particular. El precio de los materiales que se utilizan a menudo para los embalajes flexibles ha seguido aumentando en los últimos meses, un fenómeno acelerado por la subida de los precios de la energía. La demanda de aluminio y polietileno —dos materias primas esenciales para los embalajes flexibles de alta barrera— ha sobrepasado el suministro en muchos mercados.
Los precios del PET (tereftalato de polietileno) de 12 micras y del BOPP (polipropileno biaxialmente orientado) de 20 micras, ambos muy utilizados para envasar alimentos, han alcanzado niveles récord. A final de 2021, el coste del BOPP de 20 micras era un 80 % mayor que el año anterior (Flexible Packaging Europe, 2022). Por otra parte, se calcula que entre un 80% y un 85% de toda la producción de polietileno (PE) y polipropileno (PP) de EE. UU. se vio afectada por las duras tormentas del invierno en 2021 (Plastics Today, 2021), lo cual todavía está teniendo efectos.
Además, en el sector de las etiquetas, la creciente escasez de papel empieza a tener un impacto considerable en el suministro de etiquetas, que a su vez afectará a los propietarios de marcas y a sus respectivos consumidores.
Esta escasez de sustratos se ha visto exacerbada por un aumento significativo de la demanda de los consumidores en un mundo marcado por las restricciones tras la pandemia de covid.
Para los propietarios de marcas y las empresas de conversión, todo esto redunda en unos procesos más complejos, unos márgenes de beneficios reducidos, unos plazos de entrega más largos y un impacto en la producción. Muchos no son capaces de atender los pedidos en curso a los precios acordados debido al gran aumento repentino de los precios.
En BOBST, comprendemos perfectamente las presiones y dificultades a las que se enfrentan todos en toda la industria. Nosotros no podemos cambiar el precio de los sustratos, pero lo que sí podemos hacer es ayudar a manejar una amplia variedad de sustratos y minimizar el desperdicio para garantizar la continuidad del negocio.
¿Cuáles son las soluciones disponibles? ¿Cómo pueden ayudar las soluciones de BOBST? Pues bien, la tecnología oneECG de gama ampliada de colores (Extended Color Gamut) de BOBST, por ejemplo, se emplea en los procesos de impresión analógica y digital para los sectores de las etiquetas, embalajes flexibles, cartón plegable y cartón ondulado. ECG es un proceso que se utiliza para digitalizar el ajuste de color y, por lo tanto, da lugar a un desperdicio mínimo de sustratos, tintas y agua, y además reduce el consumo energético necesario para el secado.
BOBST ha desarrollado equipos diseñados para operar en todo el mundo y, por ende, son compatibles con una amplia variedad de sustratos: una gran ayuda para las empresas de conversión que necesitan recurrir a nuevos proveedores.
El control de calidad es otro aspecto esencial para mejorar la gestión de los sustratos. Una mala calidad de los embalajes recibidos por las empresas que se dedican a envasar productos, una mala calidad de los embalajes recibidos por los minoristas y los fallos en los embalajes producidos para las marcas generan unos desperdicios innecesarios que pueden evitarse. En el contexto actual, no podemos permitirnos desperdicios de este tipo, que podrían marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso.
oneINSPECTION de BOBST, un conjunto integrado de soluciones de control de calidad BOBST, ofrece completas soluciones de control de calidad que abarcan desde el diseño de las imágenes hasta el producto final, reduciendo así las retiradas de producto y los desperdicios.
BOBST fue la primera empresa en desarrollar, y después perfeccionar, un innovador sistema de control de calidad que permite a los fabricantes conseguir unas cajas con cero fallos. ACCUCHECK permite detectar todos los defectos en las poses de cartón la primera vez que entran en la plegadora encoladora BOBST y es compatible con las últimas MASTERFOLD 75|110 Y EXPERTFOLD 50|80|110. ACCUCHECK también está disponible como una característica estándar en la nueva serie DIGITAL MASTER 340/510 para la producción de etiquetas.
Gracias a los módulos flexográficos en línea que pueden integrarse en la configuración puramente digital para realizar la imprimación en línea, la serie DIGITAL MASTER representa una solución para imprimir en distintos tipos de sustratos, lo que ofrece gran flexibilidad a las empresas de conversión cuando la necesiten, en especial para afrontar problemas de desabastecimiento de sustratos.
El control de huecos premium de BOBST —ganador del premio FEFCO Gold Award a la mejor innovación— es un sistema de control del proceso de plegado de todas las cajas terminadas a la máxima velocidad de producción. Y la mesa de inspección digital BOBST es un centro de calidad que mejora las aptitudes del operario con una preparación de las tiradas en realidad aumentada y recopila pruebas fotográficas para las auditorías; así pues, genera confianza y ofrece una calidad de producción óptima de embalajes de cartón ondulado.
Por otra parte, MASTERLINE DRO —una nueva solución de troquelado rotativo— y la MASTERFLEX-HD, una impresora flexográfica, cuentan con el nuevo y pionero sistema «Start & Go» para el control de calidad y una configuración de registro de precisión ultraelevada, de modo que solo se necesitan unas cuantas hojas para configurar un nuevo trabajo. Start & Go proporciona trabajos multicolores con una configuración totalmente automática y compensación automática de la irregularidad de clichés con solo 11 hojas.
Estos son solo algunos ejemplos de las soluciones disponibles hoy en día que pueden minimizar los desperdicios y mitigar los actuales problemas de disponibilidad de sustratos. En el siguiente artículo, veremos otro problema acuciante al que se enfrenta la industria: la disponibilidad y el coste de las piezas de las máquinas, junto con algunos ejemplos de lo que estamos haciendo para solucionarlo.
¡Aunque vivimos un periodo tormentoso en el contexto internacional, estamos seguros de que en este sector encontraremos juntos una forma de capearlo!