¿Cuál era el objetivo del congreso?
El objetivo del Congreso era tener un punto de encuentro de todo el sector, tanto de profesionales como de proveedores, para reflexionar sobre los principales temas que nos preocupan. Considero que estos, han sido definidos en el conjunto de las ponencias: la amenaza de la era digital, la batalla contra el papel y la propia dimensión del sector. Parece que hemos logrado este objetivo porque en conversaciones posteriores, la gente nos ha mostrado que este Congreso les ha servido como punto de reflexión.
También estaba marcado como objetivo que el Congreso coincidiera con el relanzamiento de la economía y del sector, pero es evidente que, a todas luces, es un congreso que nos va a seguir haciendo reflexionar para poner las piedras para salir adelante.
¿Qué aportó el Congreso al sector?
Una bocanada de esperanza. Frente a una situación donde todo el mundo, o por lo menos los gurús clásicos, decían que era imposible sacar nada y que estábamos desmoralizados, el Congreso ha mostrado que el sector está vivo y que la gente tiene ganas de hacer cosas y en ese sentido creo que hay un antes y un después y así nos los han hecho saber determinados asistentes.
¿Cómo puede afectar el futuro a las empresas de Artes Gráficas?
Estamos ante una encrucijada absolutamente crucial, en la medida en que la situación económica sigue empeorando, la demanda de producto gráfico es cada vez menor y, por lo tanto, las empresas gráficas se encuentran en este momento ante una situación de adaptación a esta nueva situación de mercado. Creo que en ese sentido la gran mayoría no está concienciada de que es una situación que va a permanecer durante una etapa buena, sino que creen que sigue siendo algo coyuntural.
¿Cómo afrontarlo?
Con valentía, hay que poner los puntos sobre las íes. Durante estos dos años que llevamos de crisis, la caída media, por lo que hemos podido ponderar, ha sido de un 50% de facturación entre los dos años. Muy pocas empresas han dado pasos realmente esclarecedores para ver por dónde salimos
Hay que afrontarlo sabiendo claro que esa es la perspectiva y que, cada una de las empresas o en su conjunto, tienen que empezar a tomar medidas para ver cómo van a competir en este marco. Lo que no podemos hacer es esperar a que alguien nos vaya a solucionar nuestro problema porque no va a ser así.
¿Qué puede hacer a las empresas más competitivas en este delicado momento?
Lo ideal desde el punto de vista estratégico y de dimensión sería agruparse. Llevamos diciendo desde los gremios desde hace bastante tiempo de que es necesario tomar dimensión. Esto parece que no es fácil, porque en todo este tiempo ha habido muy pocas agrupaciones.
Creo que hay varias tareas que tienen que hacer las empresas. Primero: si pueden, que ganen dimensión y se agrupen. Segundo: adaptarse al nuevo modelo de negocio. No creo que el modelo basado en que somos el último eslabón de la cadena vaya a seguir siendo válido. Por último, es evidente que en el camino hacia lo que son las técnicas de la impresión digital y el mundo digital también nosotros debemos que tener algo que decir.
¿Esta preparado el sector gráfico español para adaptarse a los constantes cambios tecnológicos que está experimentando?
Es una pregunta muy complicada. El sector gráfico español, igual que otros, ha dado muestra en estos últimos años de un inmovilismo atroz, pero yo creo que, al fin y al cabo, el mercado pone a todo el mundo en su sitio.
¿Qué evolución prevé para la industria gráfica en los próximos años?
Lo primero que tenemos que plantearnos es que va a haber un estancamiento de negocio, eso es evidente. Esto quiere decir que básicamente lo que nosotros tenemos que afrontar es que vamos a tener menos negocio que hasta ahora y, por consiguiente, la competitividad de las empresas pasa a ser de primer orden. Esta competitividad no puede estar basada en los precios porque todos sabemos que las políticas de precios de derribo sólo pueden llevar a un camino a medio plazo, que es el cierre o la ruina de una empresa.
PULSO DEL SECTOR
Cuales son los aspectos negativos del sector
El mayor pulso negativo del sector en este momento es el sobredimensionamiento. Aquí es dónde nosotros tenemos que tratar de actuar y tenemos que afrontar de una vez por todas la reconversión de nuestro sector. Con esta dimensión, esta situación y estas rentabilidades a medio plazo, está claro que no vamos a ningún lado.
Cuales son los aspectos positivos del sector
Hay dos. En primer lugar su gran capacidad de sacrificio y de trabajo. Contamos con grandes profesionales y grandes empresarios que han levantado sus empresas. En este momento lo que tenemos que ver es cómo aunamos esa capacidad de sacrificio con la capacidad de tejer proyectos nuevos y comunes.
El otro gran aspecto positivo es su capacidad de adaptación al cambio. No olvidemos que este sector en los últimos 20 años ha pasado de la repromaster a la filmadora, pasando por el CtP y ahora la impresión digital. Durante los últimos 25 años hemos asistido a un cambio tecnológico permanente. Quiero creer que esta capacidad de adaptación a la tecnología también sea asumida por el sector como un cambio de adaptación al modelo de negocio.
Qué tendencias prevalecen en el sector
El sector es muy amplio. Pienso que todo lo que está relacionado con estuchería y etiquetería va a seguir pujando porque son una necesidad importante. En cuanto a las otras tendencias, está claro que todo parece confirmar que la edición impresa está en franca retirada y que a medio plazo esto se va a agudizar. Tenemos que ver qué otros productos gráficos son los que podemos desarrollar para mantener nuestras empresas.
Cuales son las soluciones
Para mí las soluciones pasan por la reestructuración del sector, hay que redimensionarlo ya, abrir nuevos mercados y abrir nuevos modelos de negocio y tomar la iniciativa comercial. Tenemos que dejar de esperar a que los pedidos nos vengan a nuestras fábricas y crear nosotros los productos.
Entrevista a Jacobo Bermejo, Presidente de AEAGG
Presidente del I Congreso Nacional de Artes Gráficas, celebrado en Santiago de Compostela a principios de junio del 2010.