Redacción Alabrent
Los mercados son cada vez más complejos y competitivos. La cadena de suministros se hace más larga, y son cada vez más los eslabones que conforman la experiencia del consumidor; un consumidor interconectado, inteligente, activo, y más exigente, como reto actual de las compañías y los departamentos de marketing de hoy.
El 90% de los consumidores leen las etiquetas de los alimentos en el momento de la compra. El 65% afirma leerlas siempre y otro 25%, dependiendo del producto, según los datos publicados este año por un estudio sobre la percepción que tiene el consumidor respecto al etiquetado de alimentos elaborado por ConsumoLab, área de investigación de mercados de AINIA.
Cuando el bienestar y el cuidado del cuerpo y la salud son tendencia, elementos como la información nutricional, ingredientes, y fechas de caducidad o consumo preferente, son también básicos a los que los consumidores dirigen su atención en el momento de la compra.
El estudio, realizado a más de 2.500 consumidores de todo el ámbito nacional y de diversos segmentos de edad, concluye que el 39% afirma haber notado en los últimos meses el cambio de etiquetas tras el comienzo de la aplicación de la nueva normativa sobre etiquetado vigente en España.
Según los consumidores encuestados por AINIA, los productos que tienen en el etiquetado una información más clara son los lácteos (para el 28% de los encuestados), panadería, bollería y repostería (18%), así como zumos y mermeladas (18%). En cambio, las bebidas refrescantes (23%), los productos dietéticos (20%), la carne y pescado fresco (20%) son los que resultan más difíciles de entender.
Un 60% dice no poder leer bien la información. El 59% consideran que la letra es muy pequeña, el 19% que la letras están muy juntas, mientras que para el 15% no se resalta el color de la letra. Como se ve, un área plagada de oportunidades para directores de marketing de diferentes industrias.
Cada vez más informes como este ponen en evidencia: la relevancia del etiquetado en la experiencia del consumidor, y cómo la información de las etiquetas influye en las compras y en las expectativas que se tienen sobre el producto.
Las tendencias indican que es clave, cada vez más, convertir al consumidor en protagonista; brindarle experiencias e información completa en las etiquetas de los productos; y, mantenerlas claras, sencillas, atractivas y limpias.
